Salpimentamos generosamente el conejo previamente troceado, que no quede pobre de sal ni pimienta, procurando voltearlo para hacer un sazonado homogéneo.Echamos un buen chorro de aceite en una sartén, añadimos el conejo y lo ponemos a dorar.Cuando esté dorado retiramos y reservamos.En el mismo aceite de la sartén, doramos 3 de los ajos, previamente picados muy finos, poniendo el cuarto entero y pelado. Éste último lo retiraremos cuando esté dorado, para preparar un majado en un mortero.Incluimos el romero en el mortero junto con el ajo reservado y un chorro de vinagre de jerez, lo machacamos y así conseguimos el majado deseado.A continuación, volvemos a poner el conejo en la sartén con los ajos, y añadimos el vino.Ponemos a fuego fuerte hasta evaporar el alcohol, unos 3 minutos.Después incluimos el majado, mezclamos todo con una cuchara para que se integre bien todo el conjunto con la salsa y dejamos a fuego lento unos 20 minutos más, para terminar la cocción: los primeros 10 minutos tapado para que se queden dentro los jugos y la carne quede en su punto, y luego destapamos para que la salsa tome la consistencia indicada, más bien untuosa, espesa.Antes de servir verificamos el punto de sal, añadiendo en su caso si fuere menester.