Step 1

Sazona la costilla de sal y márcala en una sartén con aceite de oliva. Retira y reserva.

Step 2

2. Lava las lentejas y ponlas en una olla. Añade la cebolla pelada entera y cortada por la mitad, la hoja de laurel, una ramita de tomillo fresco, el diente de ajo pelado, la zanahoria pelada y cortada en dos y la costilla de cerdo que has marcado. Cubre con agua fría y lleva a ebullición. Cuece a fuego medio-bajo durante 30’.

Step 3

Mientras, en el aceite de la costilla, arranca un sofrito con la cebolla y el pimiento cortados en brunoise. Cuando estén ligeramente caramelizados (hidrata con agua durante el proceso si es necesario), añade el tomate rallado. Prosigue con el sofrito hasta que se evapore el agua de cocción. Una vez listo, incorpora el pimentón y sofríe ligeramente con cuidado de que no se queme.

Step 4

Transfiere el sofrito al vaso de una batidora, e incorpora la zanahoria, el ajo y un cuarto de cebolla de la cocción de las lentejas. Añade un poco de agua y tritura.

Step 5

5. Lava, pela, lava de nuevo y chasca la patata (para que suelte su almidón) e incorpórala a las lentejas. Añade también el sofrito triturado. Cuece durante 15’ más (dependerá del tamaño de la patata, comprueba la cocción). Incorpora más agua si es necesario. Prueba y corrige de sazón.

Step 6

Sirve las lentejas, aunque con reposo te resultarán mucho más ricas.