Step 1

Coloca los contramuslos de pollo en una bandeja, salpimiéntalos bien y reserva.

Step 2

En un bol, añade el agua, 10 gramos de sal y 1 gramo de pimienta. Mezcla bien. Seguidamente, añade la harina poco a poco y mezcla con la ayuda de unas varillas hasta que consigas una textura parecida a la tempura. Si te pasas de harina, añade un poco más de agua.

Step 3

Añade el mojo al pollo, tápalo con un papel film y déjalo reposar en la nevera un mínimo de dos horas.

Step 4

Mientras el pollo reposa, en un bol, añade la mayonesa, el kimchi y la salsa de kimchi e intégralo todo con la ayuda de un batidor manual. Reserva en nevera.

Step 5

Pon un cazo al fuego, añade el kétchup, la pasta de pimiento coreano gochujang, el ajo granulado y la salsa de soja. Cocina a fuego medio durante dos minutos. Después, añade la miel y cocina a fuego lento hasta que hierva. Tritura la mezcla y deja enfriar a temperatura ambiente.

Step 6

En un cazo o en una freidora, coloca el aceite para freír y caliéntalo a una temperatura aproximada de 160-170 grados centígrados.

Step 7

En un recipiente, coloca la harina semolosa de trigo y añade las piezas de pollo. Remuévelas hasta que queden bien enharinadas, con una capa fina de harina.

Step 8

Pon a freír el pollo, en un cazo o en la freidora, durante unos 6-8 minutos. Pasado este tiempo, retíralo del aceite y déjalo reposar durante 2 minutos.

Step 9

Sube la temperatura del aceite hasta 180-185 grados y pon el pollo a freír 1 o 2 minutos más para quitarle la humedad,sellar el rebozado y que quede crujiente. Retíralo y déjalo reposar sobre papel absorbente.

Step 10

Pon el pollo frito en un plato y adereza primero con la mayonesa de kimchi y luego con la salsa Seúl. Decora con un poco de jengibre picado, cebolla japonesa picada y arroz inflado.